Es cierto que no hay un método único y fantástico que nos ayude a similar toda la información que necesitamos estudiar y así evitar estar tantas horas delante de nuestros libros o del ordenador. Días, meses... estudiando mientras el resto realiza sus planes geniales a nuestro alrededor. Por ello en este artículo no vamos a mostraros el santo grial del estudio pero sí unos consejos muy útiles que de seguro te simplificarán un poco la vida y reducirán esas horas en la biblioteca, y es que diversos estudios han descubierto algunos factores que pueden influir en nuestra capacidad para aprender.
Es mejor hacer sesiones cortas pero continuas que sesiones largas sin paradas y es que nuestra capacidad de concentración no es tanta además del cansancio que esto supone.
Repitiendo un poco lo de antes debemos añadir que las largas sesiones de estudio nocturno pueden afectarnos negativamente y dichos efectos pueden alargarse hasta 4 días. Por ello si no ponemos unos horarios específicos a lo largo del día y entramos en esta rutina nuestro cerebro al final será más proclibe a aprender en esos momentos.
Primero de todo tenemos ue organizaqr nuestra sesión de estudio marcándonos unas metas a las que queremos llevar al acabarla. Pero debemos tener en cuenta que sean unas metas reales por lo que es mejor que nuestros objetivos sean sencillos y los organicemos en pequeñas tareas ya que así nos sentiremos bien con nosotros mismos y esto nos motivará a serguir.
Una buena forma de repasar lo que acabas de leer es realizarte un esquema de ello, esto te ayudará no solo a afianzar conocimeintos sino también a estructurar un orden en tu cabeza que te será de provecho cuando estés con el examen delante. También podras repasarlo mucho más fácilmente que los apuntes y así mejorar la comprensión sobre el tema poco a poco.
Lee la segunda parte del artículo aquí: ¿Cómo estudiar mejor y tener mejores notas? (II)